LA NOCHE
La noche, ese tiempo donde soy
un hombre con el traje perforado de soledad,
donde busco incansable la magia de tu boca,
y solo encuentro el rostro de la luna, mudo testigo,
astro abandonado en el perdido sueño del poeta.
La noche siempre me escribe lentos atardeceres,
a dentelladas, encierra la luz entre las nubes
ocultando en ellas su otro nombre. Oscuridad.
Las sombras me visten con tu desnudo recuerdo
de mujer acurrucada en mis sueños,
y en las calles me esperan todos los besos olvidados.
Todavía tengo promesas que cumplir
aparcadas en las plazas azules del otoño,
en ese tiempo que dilata
la noctumbre en la que habito,
cuando el día despierta el color de los cristales,
y la noche comienza a perder todas sus luces.